Es sumamente recomendable contar con uno de ellos en nuestro hogar y conocer su funcionamiento.
Un extintor sólo sirve para atacar fuegos incipientes. No es adecuado cuando el fuego ya se ha transformado en un incendio.
¿Qué es un extintor?
El extintor o matafuegos es un aparato mecánico que, en su interior, contiene un producto que puede ser líquido, en espuma o en polvo y cuya acción provoca la extinción del fuego. Este agente puede ser proyectado y dirigido sobre el fuego para su combate gracias a la acción de una presión interna.
Hay distintos tipo de extintores de incendios. Asesórese respecto al modelo que más le conviene para su hogar, aprenda cómo utilizarlo, cómo instalarlo y cómo mantenerlo correctamente.
Distinga el tipo de incendio
Antes de utilizar un extintor para intentar combatir un fuego, es necesario hacer algunas rápidas distinciones y tomar oportunas medidas de precaución.
Es muy frecuente que los incendios ocurran en presencia de corriente eléctrica, en cuyo caso, al peligro que representa el fuego se añade el riesgo de electrocución. Por eso, antes de combatirlo, debemos desconectar la electricidad.
¿Dónde ubicarlos?
Para que un extintor cumpla eficazmente su función, no basta con elegir el tipo, clase y tamaño adecuado sino que, además, debemos encargarnos que sea instalado y mantenido correctamente, siempre asesorándonos por un especialista. Luego de este paso, deberíamos considerar la colocación de, al menos, un extintor en cada uno de los niveles de nuestra casa, en zonas que presenten peligro potencial de incendio y también cercanos a las puertas de salida.
La cocina es una de las zonas de mayor riesgo dentro de la casa, pero con cualquier electrodoméstico se puede originar un incendio. Por eso es que todos los ambientes que tengan alguno de estos aparatos deberían tener un matafuego a mano (como por ejemplo el lavadero, el garaje, etc.)
Los extintores o matafuegos deberán ser ubicados en lugares fácilmente visibles y accesibles, apoyados sobre soportes fijos a una pared, pilar u otro elemento vertical.
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El extintor o matafuego se debe utilizar de la siguiente manera:
1) Colocarnos a una distancia de tres metros, y apuntar su boquilla hacia la base de la llama
2) Apretar el gatillo mientras mantenemos el matafuego en posición vertical
3) Mover la boquilla de lado a lado, con movimiento zigzagueante, lentamente.
4) En el caso de que su acción no logre controlar el fuego, abandone inmediatamente el lugar, y recuerde que siempre debe llamar a los bomberos. No arriesgue su vida.
Si el fuego se produce al aire libre hay utilizar el extintor teniendo en cuenta la dirección del viento.
Uso y cuidados del extintor
Para asegurar su correcto funcionamiento ante una emergencia, los extintores de incendio requieren periódica atención especializada para verificar su condición:
1) Revisar el estado externo del extintor y la etiqueta de instrucciones.
2) Verificar que la boquilla y la manguera del matafuego, se encuentren en buenas condiciones.
3) Asegurarse que los sellos no hallan sido removidos, así como también comprobar la no manipulación de los precintos.
4) Examinar el estado de la carga desde el manómetro.
5) Examinar el estado de la carga una vez al año.
La vida útil de un extintor es, por lo general, de 20 años, a partir de la primera fecha de prueba de fábrica.
Clases de Fuego
Se clasifican según su origen:
Fuegos Clase “A”: MATERIALES SÓLIDOS (madera, papel, plásticos, tejidos, brasas)
Fuegos Clase “B”: GASES O COMBUSTIBLES LÍQUIDOS (aguarrás, cera, alcohol, grasa)
Fuegos Clase “C”: MATERIALES ELÉCTRICOS (electrodomésticos, interruptores, cajas de fusibles)
Fuegos Clase “D”: METALES
Fuegos Clase “K”: Fuegos en sectores de cocinas, sobre campanas de evacuación de gases, freidoras, cocinas industriales.
Se recomienda tener en el hogar un matafuegos Clase “ABC” o también llamado MULTIPROPÓSITO.
